Antes de pasar a la próxima instancia del certámen, la producción de Camino A Abbey Road visitó los lugares que vieron nacer a cada poyecto musical seleccionado para conocer y espiar cómo funcionan las bandas en su intimidad y núcleo creativo.

En el onceavo programa nos encontramos con Ilimitadas Limitaciones, LMV y Los Tracy Lord.

Como lo cantan ellos a los cuatro vientos, los Ilimitadas Limitaciones salieron de Cobos al mundo. Por eso fuimos a Parque Chacabuco para conocer dos lugares particulares de trascendencia para la banda que combina con mucha alegría y desparpajo ska, cumbia, reggae y rock. Visitamos la carnicería de su percusionista y la cantina Calamora, clubes sociales y puntos de encuentro que siempre terminan siendo el broche de oro gastronómico tras ensayos, reuniones y zapadas.

Nos encontramos en Temperley con Los Tracy Lord, quienes entraron al concurso casi por accidente y. en medio de un parate que los encontraba frenados y sin ensayos previos, se terminaron convirtiendo en una de las propuestas preferidas del jurado, gracias a su performance arrolladora.

La banda nos introdujo a Tracy World, sus estudios montados en una casa en la que funcionaba un antiguo taller mecánico que, tras la pausa por el accidente automovilístico de su cantante, fue restaurada y puesta a punto para dar forma a lo que ahora es su bunker musical.

Entre los hitos de su trayectoria, la banda señaló que en 2009 tuvo la oportunidad de abrir el show de regreso de La Renga en Huracán.

LMV, un trío que combina con mucha naturalidad y flow el rap con R&B y funk, persigue como objetivo vivir La Mejor Vida, siendo uno mismo y haciendo lo que a uno le gusta (de ahí su nombre). Nos trasladamos hacia La Lucila y visitamos el colegio donde se conoció y empezó a soñar esta banda de hermanos y amigos, un espacio de formación educativa que los vio crecer del que preservaron la inocencia, creatividad y libertad, que ahora la plasman a su proyecto artístico.